11 dic 2015

Punto y...


Aunque te empeñaste, jamás quise que fueras mi musa. Conmigo sólo surte efecto en los peores momentos, por eso nunca te quise en esa categoría. Ya has puesto un pie en ese mundo en el que no quiero verte dar un paso más. Allí, sentado en un banco, observo cómo te mueves a cámara lenta mientras el tiempo pasa de forma regular en mi cabeza.

Imaginé una larga ruta con paradas en todas las estaciones, pero no.
Creé una serie sin season finale, pero no.
Revelé un carrete de fotos infinitas, pero no.
Escuché el mejor disco de la historia, pero no.

En ese momento éramos una burbuja que nos separaba de la suciedad y en un solo abrazo odié todo lo que había alrededor. Putas vallas que cercan un parque de niños. Putos árboles que colorean mi campo de visión. Putos edificios que rodean este jardín. Putas farolas que iluminan mi cara. Y, por supuesto, puto banco en el que decidí sentarme.

Estás a un paso de leer "Bienvenida al mundo de las musas".